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El PEMB y el Pacto Industrial organizan una jornada con expertas, administraciones e industria, que reclaman más financiación, agilidad administrativa y formación para avanzar hacia un modelo sostenible y con empleo de calidad

El PEMB i el Pacte Industrial organitzen una jornada amb expertes, administracions i indústria, que reclamen més finançament, agilitat administrativa i formació per avançar cap a un model sostenible i amb ocupació de qualitat
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Laura Casserres

El espacio La Ciba de Santa Coloma de Gramenet acogió este jueves 4 de diciembre la segunda edición de la jornada ‘La construcción industrializada de vivienda en la región metropolitana de Barcelona: factores clave y financiación’, organizada por el Plan Estratégico Metropolitano de Barcelona (PEMB) y el Pacto Industrial de la región metropolitana de Barcelona, con el apoyo del Ayuntamiento de Santa Coloma de Gramenet y la Diputación de Barcelona. El encuentro reunió a representantes institucionales, profesionales del sector y agentes económicos para abordar los retos y oportunidades de la construcción industrializada como un modelo que favorece la sostenibilidad y la eficiencia del sector, impulsa la creación de empleo de calidad y puede dar respuesta a la actual emergencia de vivienda.

La alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet y miembro del Consejo Rector y de la Comisión Territorial del PEMB, Mireia González, abrió la sesión señalando que la construcción industrializada “necesita un salto de escala” para responder a la crisis de vivienda y defendió que las políticas públicas de vivienda deben ser ambiciosas: “Tenemos un nivel de densidad muy elevado y cada metro cuadrado tiene un valor altísimo porque se le puede dar mucho uso”. González destacó que los planes locales de vivienda de la ciudad afrontan los retos de incrementar el parque existente, rehabilitarlo y prevenir la pobreza energética.

Por su parte, la alcaldesa de Rubí y presidenta del Comité Ejecutivo del Pacto Industrial, Ana María Martínez, subrayó que la industrialización es clave para dar una respuesta inmediata a un problema urgente y advirtió que estamos poniendo en riesgo la cohesión social del país si no se actúa con decisión, y que esta presión se intensifica en el territorio metropolitano y tiene consecuencias también para la segunda corona. Martínez explicó asimismo que el Plan Estratégico Metropolitano de Barcelona ha definido la misión de vivienda adecuada para abordar este problema y que, entre todas las administraciones, es necesario buscar y activar “palancas” para lograr dar un salto de escala en este sector y acelerar la respuesta.

Construcción industrializada: un cambio de modelo necesario

El director técnico del ITeC (Institut de Tecnologia de la Construcció), Ferran Bermejo, ofreció una ponencia que dibujó el contexto crítico del sector y las potencialidades de la industrialización. Bermejo señaló que la falta de producción de vivienda y el aumento demográfico en la última década han generado una “tormenta perfecta” que ahora es necesario revertir. Remarcó que la construcción industrializada no es un producto, sino un proceso colaborativo que implica toda la cadena de valor, e incorpora digitalización, sostenibilidad y automatización. Subrayó que “industrializar no es prefabricar”, sino optimizar procesos y garantizar más calidad, menos residuos y una fuerte reducción de los tiempos de obra. Aun así, advirtió que “no basta con construir más rápido: si no mejoramos los procedimientos administrativos, no resolveremos el problema”, y reclamó una transformación profunda de los procesos administrativos, la simplificación de la burocracia y un impulso al financiamiento y a la formación para apoyar el salto de escala. “La construcción industrializada puede ser parte esencial de la solución, pero solo si el país crea las condiciones para que este modelo prospere y escale”, concluyó.

 

Impulso financiero y retos del sector

El primer panel, moderado por la periodista especializada en economía Laura Casserres, centró el foco en los instrumentos financieros que pueden acelerar la expansión de la construcción industrializada. Maribel Vergara, directora del PERTE de la Industrialización de la Vivienda, explicó que el programa cuenta con 1.300 millones de euros y fue contundente: “queremos financiar lo máximo posible”. Según Vergara, la administración central dispone de los instrumentos, la tecnología y los fabricantes, pero lo imprescindible es una colaboración público-privada —que ya se está produciendo— y centrarse en las demandas del sector privado.

Desde el Banco Europeo de Inversiones (BEI), Elena Campelo recordó que la promoción de vivienda es una prioridad para el BEI y subrayó la importancia de definir bien los pliegos de contratación para que la opción industrializada se convierta en la más ventajosa y pueda alcanzarse este salto de escala.

Por su parte, Vanessa Servera, consejera delegada del Institut Català de Finances (ICF), advirtió del cuello de botella financiero vinculado a la producción en fábrica y reclamó que los tasadores certifiquen la obra ejecutada en origen, ofreciendo el ICF como banco público para impulsar soluciones financieras. Finalmente, Tamara Lemos, directora de Negocio de Construcción Sostenible de Triodos Bank España, remarcó que la industrialización es un medio para garantizar confort, salud y eficiencia, y que debe planificarse desde el primer momento del proyecto, conociendo las necesidades financieras de cada fase.

En la segunda parte, dedicada a los retos y oportunidades del salto de escala, tres profesionales analizaron las necesidades del sector desde la formación, la industria y la promoción pública. Antonio Espinar, del Observatorio de la FP de la Fundació BCN Formació Professional, defendió reforzar la formación y reivindicar los itinerarios de FP para asegurar talento, especialmente femenino. Desde la industria, José Manuel Garcilópez, director de Construcción Industrializada en Saint-Gobain, afirmó que el cambio ya está en marcha y reclamó que administraciones y sector avancen coordinadamente. Blanca Noguera, jefa del Servicio de Vivienda e Innovación de IMPSOL (Institut Metropolità de Promoció de Sòl i Gestió Patrimonial), insistió en no renunciar a la calidad arquitectónica y en trabajar de forma alineada desde el inicio, alertando de los condicionantes logísticos de muchos solares metropolitanos.

Cerró la jornada Sergi Fuster, presidente de la Comisión de Innovación del Pacto Industrial, recordando que la innovación es esencial para la competitividad metropolitana y para aportar soluciones a la situación de emergencia de vivienda. También remarcó que el futuro del sector de la construcción pasa por priorizar la colaboración público-privada, el financiamiento y el talento.