Las ciudades del Arco Metropolitano constatan que es necesario un salto a la escala regional para afrontar retos ambientales, de movilidad o de vivienda comunes
La presentación del estudio encargado por el Ayuntamiento de Mataró al IGOP sirve para reunir las grandes ciudades de la segunda corona en un acto con el sello Barcelona Demà para hacer frente común para reclamar más recursos y una mejor cogovernança
- 10-06-2021
- Compromiso Metropolitano 2030
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No se podrá poner fin a la segregación urbana que se produce en grandes ejes metropolitanos si no se produce un reparto más equitativo de los recursos. Esta fue una de las grandes conclusiones de la presentación del estudio encargado por el Ayuntamiento de Mataró al IGOP, “La metrópoli post-covid. La contribución y los recursos de las ciudades del arco metropolitano', que sirvió como pretexto para reunir las grandes ciudades de la segunda corona en una misma mesa de debate para situar las problemáticas conjuntas que las afectan. Terrassa, Sabadell, Mataró, Vilanova y la Geltrú, Granollers y Vilafranca del Penedès constataron que es necesario un salto de escala regional para afrontar retos ambientales, de movilidad o de vivienda que comparten. El punto en común de todos ellos: acogen a más población con necesidades pero lo hacen con menos recursos que sus municipios vecinos, una carencia que, desde su punto de vista, hay que revertir.
El mes útil del estudio, aseguró el alcalde de Mataró, David Bote, 'no es qué hace diferente Mataró, sino las dinámicas conjuntas con otros municipios de la RMB. Tenemos mucho en común y que nos condiciona el futuro'.' Tenemos menos capacidad de recaudar porque nuestra gente tiene menos recursos', alertó Lluïsa Melgares, concejala en el Ayuntamiento de Terrassa, que situó como urgencia' poner freno a la segregación territorial'. Y es que, otra de las grandes conclusiones del estudio y que situaron Oriol Nel·lo, professor de la UAB y director del estudio y Ismael Blanco, director del IGOP, fue que no sólo las personas tienen tendencia a juntarse según capacidad de renta, sino que es una tendencia que se percibe en ejes metropolitanos enteros.
'Los territorios acabamos asumiendo parte de complejidad pero no tenemos los recursos suficientes para hacer frente. No podemos tener diferentes velocidades entre el arco metropolitano y el resto porque sino no vamos a salir adelante', denunció la alcaldesa de Sabadell, Marta Farrés, que reclamó invertir más recursos teniendo en cuenta estudios como el del IGOP y no sólo teniendo en cuenta un criterio poblacional que 'no termina siendo justo'.
Por todo ello, los y las representantes del conjunto de municipios de la mesa asumieron su papel de lobby constituidos en la Asociación Municipal Arco Metropolitano, para hacer fuerza de manera conjunta para abordar problemáticas comunes y para aspirar a conseguir más recursos como los Next Generation, una demanda más allá de 'colores políticos'. 'Es necesario que la Generalitat también nos reconozca. Hay dinámicas que hay que corregir desde la cooperación, con políticas de redistribución y equilibrio con la misma filosofía que la Ley de barrios ', agregó Bote. 'Los Next Generation funcionarán si son repartidos de manera equitativa, si hacemos guerra de codos no saldremos', aseguró la alcaldesa de Vilanova y la Geltrú, Olga Arnau.
Por su parte, el alcalde de Granollers, Josep Mayoral, puso encima de la mesa la necesidad de reivindicar el peso local a la hora de tomar determinadas decisiones como el plan territorial y, por ello aseguró que 'hay músculo' y 'exigir respeto'. Aún así, Pere Regull, alcalde de Vilafranca del Penedès, quiso advertir que hay muscular para conseguir retos pero 'lo más importante es cambiar estructuras y dinámicas' para evitar que quien tiene capacidad fiscal marche de unos municipios para situarse en otros y que siempre sean las mismas ciudades las que reciben personas con más necesidades sociales. 'Hace falta una gobernanza diferente porque quizás en la misma comarca hay ciudades con diferentes necesidades que se deben cubrir', añadió.
Finalmente, el encargado de cerrar la sesión fue el vicepresidente de planificación estratégica de la AMB y presidente de la comisión ejecutiva del PEMB, Jordi Martí, quien puso en valor 'tener un territorio bien articulado que va en la buena dirección, con una visión compartida de trabajar juntos transversalmente, independientemente de los colores políticos' y afrontar el reto de conseguir con el proceso Barcelona Demà definir una propuesta de progreso, equidad social, dar respuesta a la emergencia ambiental, la cultura y la innovación a escala de RMB y conseguir las propuestas de mejora de gobernanza para este espacio de región '.
Aunque no participaron en el debate, entre el público también había representación del resto de ciudades que forman parte de la Asociación Municipal Arco Metropolitano, con la alcaldesa de Rubí, Ana María Martínez, el alcalde de Martorell, Xavier Fonollosa, el 4º Teniente de Alcalde del Ayuntamiento de Mollet del Vallés, Raúl Broto y representantes de la AMB y las asociaciones municipalistas (FMC y ACM).