Entrevista a Genís Roca
Experto en transformación digital
- 13-11-2019
- Actualidad del PEMB
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Después de que el INE anunciara que rastreará todos los móviles del Estado durante 8 días para hacer un estudio de movilidad Genís Roca tuiteó: 'Que un estudio incluya TODA la población era evitable, ya que hay técnicas de muestreo. Tiene un absurdo coste de alarma social. Pero ahora ya todos somos conscientes de que lo hacen y lo pueden hacer cuando quieran'.
Desde el Plan Estratégico Metropolitano de Barcelona hemos organizado, precisamente, en el marco de las actividades de la Smart City Week, un cine-fórum para tratar esta temática que tiene por título 'Datos personales masivos: ¿quién, cómo y para qué los utilizan?'. Acabamos de ver para qué los pueden utilizar, de lo que la mayoría somos conscientes, porque según sus palabras 'sale más rentable rastrear todos que hacer un muestreo'.
¿Los motivos económicos lo justifican todo, entonces? ¿Cree que esto que ha pasado con el INE sentará un precedente?
Es evidente que los motivos económicos no pueden justificar todo, pero también es evidente que las organizaciones intentan obtener los mejores resultados con el menor coste y esfuerzo. Segmentar la población en muestras representativas es un esfuerzo que además tiene el riesgo de caer en errores y dañar las posteriores interpretaciones. Y con la tecnología actual es perfectamente posible y razonable trabajar con los datos del total de la población, y no una muestra. Aquí no veo demasiado problema. Para mí el problema no es técnico, económico o pragmático, sino de derechos y deberes. ¿Somos conscientes de en qué casos y en qué condiciones alguien podrá utilizar nuestros datos? ¿Están garantizados nuestros derechos y deberes? Sospecho que habría que revisar las reglas de juego antes de permitir que se juegue masivamente.
Esta 'alarma social' de la que habla, ¿es real? ¿A qué debemos tener miedo?
El caso del INE lo hemos conocido por tratarse de una institución pública que está obligada a hacer públicos sus concursos, licitaciones y contratos. De hecho, casi todos los casos que conocemos son del ámbito público. Pero no tenemos ningún conocimiento ni ninguna certeza de cuántas veces ha pasado lo mismo en el ámbito privado, y no sabemos por qué usos, con qué objetivos, con qué datos ni cuantas veces. Tampoco tenemos claro que ningún regulador lo esté vigilando y tenemos que confiar sencillamente en que cada empresa hace las cosas de la mejor manera. Pero, por ejemplo, con los temas fiscales hemos comprobado cómo es posible hacer las cosas de manera legal pero lejos del interés común, pues hay quien hace la actividad aquí pero tributa en otro país. Si con los temas fiscales, fuertemente regulados, hay malas prácticas que nos perjudican... ¿qué puede estar pasando con nuestros datos ahora que sabemos que las utilizan ya de forma muy potente y ambiciosa?
Cree que lo que pasó con Cambridge Analytica en las últimas elecciones presidenciales en EEUU -como nos cuenta el documental 'The Great Hack' en el cine-fórum- ¿nos debería haber advertido de lo que podía pasar y hacernos reflexionar ?
Creo que lo que pasó con Cambridge Analytica está lejos de ser una anécdota y por el contrario es una práctica habitual. Creo que el trabajo con datos personales para crear estados de opinión y promover unos u otros intereses es una ciencia absolutamente desarrollada, y que se está intentando protegerla fijando la idea de que todo fue sólo una mala praxis puntual y anecdótica. Pero no. Hay un montón de algoritmos que, en base a datos personales, desarrollan modelos predictivos de nuestras acciones y opiniones, y se llevan a cabo acciones para condicionarnos. Cambridge Analytica era la filial estadounidense de una empresa con matriz inglesa que se llama SCL Group que hace más de 25 años que se dedica esto y tiene como clientes gobiernos y ejércitos de todo el mundo. Basta consultar la Wikipedia. Ni Cambridge Analytica ni SCL Group son ninguna anécdota. Hay cientos de empresas que se dedican, por no hablar del uso masivo e indiscriminado de bots o fake news por partidos políticos de todo el mundo. Así que sí, claro que deberíamos estar reflexionando sobre todo esto. Reflexionando y actuando.
Usted reivindica un debate técnico-legal y social para abarcar esta cuestión, ¿dónde y cómo lo hacemos y aqué escala?
Tengo propuestas concretas a hacer, que espero poder publicar pronto ya con el nivel de detalle y seriedad que merece el tema. Y giran alrededor de una idea general: la ley no será suficiente, y es necesario que la ciudadanía se persone con rol de vigilancia ante todas aquellas organizaciones, públicas o privadas, que manejan datos personales. Hay que auditamos y controlamos todos los usos que hagan, tanto si quieren como si no. La solución pasa por el activismo ciudadano, en paralelo al desarrollo del marco legal.
También asegura que no conoce los mecanismos de control social, pero últimamente hemos visto que mucha gente se ha sumado a Telegram, entre otras cosas, porque es más difícil de rastrear. ¿Es éste el futuro? ¿Dejaremos de utilizar aplicaciones como WhatsApp y buscaremos disfrutar de más privacidad?
El futuro es utilizar herramientas que sean claras respecto a los usos que harán con nuestros datos, y con esta información tomar nosotros la decisión de qué solución nos conviene más. Es público que WhatsApp es una plataforma más dispuesta que Telegram a colaborar con el Estado, pero sin ponernos conspiranoicos también es relevante que el hecho de que WhatsApp tú no puedes evitar que todos los miembros de un grupo conozcan tu número de teléfono mientras que en Telegram, a pesar de estar en el mismo grupo, no es necesario que el resto de miembros tengan esta información. Y aún más detalles: en WhatsApp te pueden añadir a un grupo de conversación aunque no quieras, mientras que en Telegram se puede hacer que sea necesario su consentimiento. Así que hay muchos motivos para preferir Telegram, aparte del tema hecho de si te rastrean o no.
Hablamos siempre de toda la parte oscura y negativa de la gestión de los datos personales, pero ¿cuáles son las ventajas, si es que las hay?
La atención personalizada y proactiva gracias a los datos en tiempo real es una maravilla que queremos, necesitamos y deseamos para muchas cosas de nuestra vida presente y futura. Es un camino que abrazo feliz y convencido. Las mejoras en servicios de movilidad, salud, ocio, cultura, etc. son casi infinitas. Sencillamente, necesito fijar las reglas del juego para preservar los derechos y deberes. Sin nerviosismo ni paranoia. Nuevas oportunidades que queremos, pero que necesitamos tengan unos usos ordenados. El que inventó el fuego se quemó, pero no dejó de querer utilizar el fuego, así que adoptó medidas para no hacerse daño.