La Carta Alimentaria de la Región Metropolitana de Barcelona y la Capital Mundial de la Alimentación Sostenible 2021: dos oportunidades para una estrategia alimentaria metropolitana
La sesión en el AMB cierra un ciclo de 'webinars' destinados a captar los impactos de la situación de emergencia por la Covidien-19 en los sistemas alimentarios locales y vincularlos a una mirada a largo plazo
- 03-07-2020
- Compromiso Metropolitano 2030
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La sala de plenos de la AMB ha acogido hoy la presentación ante ayuntamientos del conjunto de la región metropolitana de Barcelona (RMB) de dos elementos clave para la estrategia alimentaria metropolitana: la Carta Alimentaria de la Región Metropolitana de Barcelona (CARM) y la Capital Mundial de la Alimentación Sostenible 2021 (CMAS2021). Se cierra así un ciclo de webinars celebrados entre abril y junio y abierto a los diferentes ayuntamientos de la RMB con el objetivo de definir e interpretar los impactos de la situación de emergencia generada por la Covidien-19 en los sistemas alimentarios locales.
Según explicó el coordinador general del PEMB, Oriol Estela, la CARM, fruto de dos años de trabajos, comenzará a recibir adhesiones a partir de mediados de julio y debe servir para hacer visible y dar forma al compromiso de los municipios, pero también de el resto de actores del sistema alimentario, de avanzar hacia un modelo más justo, sostenible y saludable. Por ello, la CARM también debe servir para facilitar espacios de participación, acción y estrategia para el desarrollo de políticas alimentarias en clave local y de región metropolitana. Situar el derecho a la alimentación como derecho fundamental, tener en cuenta la alimentación como política pública transversal y reconectar el territorio urbano con el rural son algunos de los principios que rigen la CARM y serán la base de la futura Estrategia alimentaria metropolitana incluida en el Compromiso Metropolitano 2030.
Pero la CARM también tiene como reto integrar la mirada metropolitana en el proyecto Capital Mundial de la Alimentación Sostenible que ostentará Barcelona el año 2021, y reunirá el encuentro anual de los Alcaldes firmantes del Pacto de Milán, un tratado voluntario firmado por 209 ciudades, entre las que se encuentra Barcelona, que se comprometen a impulsar sistemas agroalimentarios sostenibles, inclusivos, resilientes, seguros y diversificados. Granollers es, a día de hoy, la otra ciudad catalana firmante del Pacto. 'La Capitalidad debe ser la chispa para impulsar la CARM. La Carta debe servir a los municipios para avanzar hacia un modelo más justo, sostenible y saludable', aseguró.
Tal y como ha explicado el comisionado de Economía Social y Solidaria CMAS2021, Álvaro Porro, el proyecto también debe servir para acoger una serie de eventos e iniciativas, tanto en la ciudad como en el entorno metropolitano, en los que la alimentación sostenible, justa y sana sea el principal elemento vertebrador, desplegar políticas y proyectos alimentarios para situar la metrópoli de Barcelona como referencia en este ámbito y construir una estrategia de políticas alimentarias con horizonte 2030. La capitalidad de la alimentación sostenible es, pues, una palanca para impulsar una transición alimentaria con la que se logre fortalecer las economías locales sostenibles y mejorar la salud de las personas, así como la del conjunto del planeta.
Ciclo #Foodweb
Precisamente CARM y CMAS2021 también fueron las protagonistas de la última de las sesiones virtuales del ciclo #Foodweb organizado por el PEMB, un total de cuatro webinars con ayuntamientos del territorio metropolitano que sirvieron de introducción a la sesión de presentación dirigida a responsables políticos municipales de hoy.
El ciclo #Foodweb nació a raíz de la actual crisis sanitaria y la intensificación de algunos de los retos de nuestro sistema alimentario, como el de garantizar el abastecimiento de productos frescos, saludables y seguros para todas las personas. En total, se han llevado a cabo cuatro sesiones: 'Sistemas de reparto a domicilio', 'Herramientas para combatir las nuevas vulnerabilidades alimentarias', 'Herramientas de apoyo a la restauración sostenible' y 'La Carta Alimentaria de la Región Metropolitana (CARM) ', en las que han participado representantes de diferentes administraciones, del ámbito académico, del sector privado y de organizaciones ciudadanas.
Un elemento común en todas las jornadas ha sido el reconocimiento de la alimentación como sector esencial y de la capacidad de adaptación de nuestro sistema alimentario, desde la producción al consumo, a la nueva situación de emergencia mediante, por ejemplo, la apuesta por el producto local, nuevas formas de distribución o alianzas entre diferentes actores de la cadena. Logros que hay que mantener una vez la situación excepcional termine, pero los que también hay que analizar las externalidades, como los posibles efectos medioambientales del incremento de la distribución a domicilio.
La necesidad de reconocer que a pesar de disponer de una oferta alimentaria amplísima, esta es desigual y va ligada a elementos como la renta familiar o el territorio donde se vive, ha sido otro de los factores repetidos a lo largo del ciclo. Este hecho conlleva que parte de la población no tenga acceso a una alimentación saludable y es por eso que hay que seguir profundizando en el estudio de los entornos alimentarios y de los factores que los configuran. La necesidad de contar con el apoyo de las administraciones públicas y de incorporar los sistemas alimentarios como un ámbito de la política pública ha sido uno de los principales reclamos.
La crisis de la Covid-19 ha puesto la capacidad de resiliencia de los sistemas alimentarios locales en el punto de mira pero también ha supuesto, y supone una oportunidad para generar y consolidar estrategias alimentarias en clave de región metropolitana. Las diferentes sesiones #Foodweb han servido para recoger necesidades e impresiones entorno a la situación que ayudarán a articular una propuesta de acción y colaboración metropolitana a largo plazo bajo el marco de la Carta Alimentaria de la Región Metropolitana de Barcelona y durante el transcurso de la Capital Mundial de la Alimentación Sostenible 2021
Fotos: Pere Virigili